Tiburón boquiancho
El tiburón boquiancho o tiburón de boca ancha (Megachasma pelagios) es una especie de elasmobranquio lamniforme de la familia Lamnidae. Es una especie inusual y muy rara que fue descubierta en 1976, cuando el primer espécimen conocido llegó a las playas de Hawái. Su descripción científica como nueva especie fue publicada en 1983 por Taylor, Compagno y Struhsaker.
Su cuerpo es de forma afilada, flácido, color marrón negruzco y, como su nombre indica, tiene una boca enorme, redondeada, y con un grupo de pequeñas manchas circulares en el «labio» de la mandíbula inferior, órganos luminiscentes que seguramente le ayudan a atraer el alimento. Sus dientes son pequeños y no funcionales. El máximo tamaño reportado es de aproximadamente 5,50 m. Los machos cuando maduran sexualmente llegan a alcanzar una longitud aproximada de unos 4 m, mientras que las hembras alcanzan los 5 m de longitud total.
Habitualmente se desplaza lentamente a través del agua con la boca semiabierta para capturar el plancton, crustáceos (fundamentalmente eufausiáceos) y los peces pequeños de los que se alimentan, tal como hacen el tiburón peregrino o el tiburón ballena o las ballenas barbadas.
Es una especie ovovivípara, lo que significa que las crías crecen en huevos y son incubados en el cuerpo de la madre.
Es una especie difícil de encontrar por lo que se sabe poco sobre sus costumbres y número de ejemplares. Hasta el momento se han documentado 55 especímenes en el mundo en un período de cerca de 30 años, incluyendo uno de los más recientes ejemplares que fue capturado el 12 de junio de 2019 en una red de cerco del barco “Bamar II” en aguas cercanas a la Isla Lobos de tierra, en Perú. En general no parece demasiado peligrosa para el ser humano, aunque serán necesarios nuevos estudios para confirmar este hecho.