¿Qué es una especie?
La unidad taxonómica básica de los seres peculiares es la especie. Ernst Mayr la definió en 1940 como «grupos de poblaciones que se cruzan real o potencialmente entre sí y que han quedado aisladas de otros grupos». Es decir, si los miembros de una especie intercambian su material genético libremente con los de otra, no podrían mantener sus características distintivas propias.
El león, el oso polar o el orangután son, evidentemente, especies diferentes, pero no siempre las diferencias son tan claras. Por ejemplo, muchos zoológicos piensan que sólo existe una especie de gorila con varias subespecies, pero otros, en cambio, consideran al gorila de montaña como una especie distinta. A pesar de esas dificultades, la definición de especie como una población que se puede entremezclar y que tiene descendencia fértil suele resultar válida, aunque haya poblaciones de un mismo animal que nunca se encuentran.
Por ejemplo, los lobos de Norteamérica y Europa están separados por el océano Atlántico, pero se suelen considerar miembros de una misma especie, Canis lupus, porque los zoológicos creen que si llegaran a cruzarse tendrían descendencia fértil.