África
Tijereta

Tijereta

Los dermápteros (Dermaptera, del griego δερμα derma, piel y πτερον pteron, ala) son un orden de insectos neópteros conocidos vulgarmente como cortapicostijeretastijerillas o cortatijeras, todos los cuales aluden a la impresión que producen los cercos en forma de pinza, tenaza o tijera que estos insectos tienen en el extremo posterior del cuerpo. Son insectos de cuerpo alargado, algo aplanado, de tamaño mediano a pequeño, de color pardo o rojizo, y con el ya mencionado par de cercos posteriores. Normalmente viven bajo piedras o entre la corteza de los árboles.

Son insectos frecuentes, de los que existen unas 1.840 especies,​ la mayoría tropicales, aunque también los hay en regiones templadas y desde hace algunos años en zonas frías como el extremo sur de América. Las alas anteriores (en caso de existir) funcionan como élitros o más bien elitroides, y recubren las posteriores que son semicirculares y membranosas; aparato bucal tipo masticador; antenas largas multisegmentadas, delgadas; comparten este rasgo anatómico con los escarabajos de la familia estafílinidos, aunque no están relacionados evolutivamente con ellos. Los cercos posteriores están fuertemente curvados en los machos, que los usan durante la cópula. Sirven además para las operaciones de desplegar y recoger las alas. Son hemimetábolos, y tienen de 4 a 6 estadios ninfales.

En cuanto a la alimentación, la mayoría son omnívoros o saprófagos. Los omnívoros son nocturnos, y usan los cercos en la depredación. Poseen también glándulas repugnatorias defensivas.

Muchas especies prodigan cuidados maternales a los huevos, volteándolos y lamiéndolos continuamente para evitar cualquier contaminación.​ Una parte de los miembros del grupo son vivíparos, habiendo desarrollado en la evolución estructuras placentarias para la nutrición de los embriones.

Anteriormente existía en el mundo anglosajón la creencia falsa de que las tijeretas se introducían en el cerebro a través de los oídos de las personas y de ahí su nombre en inglés «earwig», que significa «insecto de oído». A pesar de haberse documentado raros casos de intromisiones de estos insectos en los oídos, no llegan más allá de la membrana del tímpano, donde quizás puedan causar algunas molestias que vendrían a darle cierta credibilidad al mito. 

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